Los principales minoristas del espacio online están luchando contra las altas expectativas de los clientes para ofrecer las mejores experiencias posibles. Los consumidores de hoy desean el menor tiempo posible entre la compra y la entrega del producto. El panorama del comercio electrónico ha cambiado significativamente en los últimos años y seguirá evolucionando a medida que los centros de distribución (DC) busquen formas únicas de seguir siendo competitivos, y aumentar sus esfuerzos de automatización y ejecución.

La experiencia del comercio electrónico ha cambiado de realizar una compra y tener que esperar unos días (o incluso una semana) antes de recibir su(s) artículo(s). No existían opciones para ejecutar y entregar un pedido al día siguiente, o incluso unas horas después de la compra. Pero ahora, estos tiempos de respuesta rápidos a menudo pueden representar perturbaciones no planificadas para las operaciones en la tienda.

Los minoristas tradicionales pueden usar sus tiendas como un lugar de retiro fácil. El problema de cumplir con los pedidos en línea en la tienda significa que el espacio de almacenamiento es limitado. Los centros de distribución y ejecución más grandes no tienen la capacidad de utilizar el espacio en la tienda para fines de ejecución. Para cumplir con los plazos de entrega de unas pocas horas o al día siguiente, han tenido que invertir en centros (o hubs) de micrologística más pequeños, que a menudo están mucho más cerca de las áreas urbanas donde los bienes raíces son más costosos, lo que representa un impacto en sus márgenes de beneficio. Incluso la industria minorista de alimentos ha cambiado la forma en que algunos consumidores compran alimentos; muchos ofrecen soluciones de retiro que permiten a los clientes permanecer en su automóvil y evitar toda la experiencia de compra en la tienda.

Para prepararse para el futuro de la micrologística en el cambiante panorama del comercio electrónico, tanto las tiendas minoristas como los centros logísticos están invirtiendo en tecnología que ayudará a aliviar la carga de los tiempos de respuesta ajustados y las altas demandas de los clientes. El almacenamiento de alta densidad reduce el espacio de almacenamiento hasta en un 85 %, lo que ayuda a los centros logísticos con sus limitaciones de espacio. La integración robótica puede almacenar y recuperar elementos, lo que puede liberar mano de obra humana para centrarse en otras tareas.

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