El ABC de un Programa Respiratorio Escrito

Los contaminantes peligrosos en el aire están en todas partes, ya sea que usted trabaje en la construcción, la fabricación, la minería o la lucha contra incendios. Más que una molestia, la exposición al polvo, a los gases y a los vapores puede provocar enfermedades graves y potencialmente mortales.

Sabemos que una "máscara uniforme" no es un enfoque eficaz, pero a veces los profesionales de la seguridad tienen problemas para identificar la mejor solución para defenderse del peligro. Si está revisando su programa respiratorio o comenzando desde cero, he aquí algunas directrices que debe tener en cuenta en la selección del PPE respiratorio.

Creación de Un Programa Respiratorio

Si se utilizan respiradores en el área de trabajo, se requiere un programa escrito que aborde todos los riegos respiratorios que se pueden encontrar. Este programa deberá ser adaptable y fluido para acomodarse a cualquier cambio que se pueda presentar. Varias sedes pueden compartir un programa si las sedes son similares, pero debe ser específico para cada lugar si tienen su propio conjunto de problemas y soluciones. El programa deberá ser revisado cada vez que se presente algún cambio, ya sea por un nuevo contaminante o concentración, o por un nuevo control de ingeniería; esta revisión también se deberá realizar al menos de forma anual.

Antes de establecer o revisar su programa de respiración actual, es necesario abordas las siguientes cuestiones:

1. ¿Cuáles son los contaminantes presentes en el ambiente y cuál es su concentración?
2. ¿Los contaminantes están por encima del valor IDLH o los niveles de oxígeno son inferiores al 19,5% o superiores al 23%?
3. ¿Hay un programa de respiración escrito y se encuentra este actualizado?
4. ¿Se ha realizado una evaluación médica a todos los trabajadores?
5. ¿Todos los trabajadores se han realizado pruebas de ajuste con el respirador adecuado?

1.  Selección Respiratoria: Identificación de los peligros y concentraciones de los contaminantes.

Al comenzar el proceso de selección de un respirador, hay que enfocarse en el contaminante. Con frecuencia, los respiradores se recomiendan estrictamente por el trabajo que se realiza o por el contaminante presente cuando, en realidad, lo que más importa es la concentración.

Por ejemplo, la mayoría de los trabajadores expuestos a la Sílice Cristalina usan mascarillas de respiración desechable N95. Este tipo de mascarillas de respiración están probados y certificados para proteger a los trabajadores de hasta 500 microgramos de sílice por metro cúbico, diez veces el límite de exposición permitida establecida por la OSHA.

Sin embargo, si un trabajador es expuesto a un ambiente de 1.000 microgramos de sílice por metro cúbico, este corre el riesgo de desarrollar silicosis u otras enfermedades potencialmente mortales. Incluso si una mascarilla de respiración desechable N95 es la solución que se encuentra a la mano, en esta situación no sería suficiente. En su lugar, este trabajador estaría mejor protegido con un respirador de cara completa con una prueba de ajuste cuantitativa o incluso con un respirador purificador de aire motorizado (PAPR).

2. Evaluaciones Médicas: Deben completarse antes del primer uso y de la prueba de ajuste; pueden ser constantes para contaminantes específicos.

Antes de elegir un respirador, los trabajadores deberán completar una evaluación médica para asegurar que puedan utilizarlo con seguridad. En la mayoría de los casos, esto se hace con cada nueva contratación. Algunos contaminantes, como la sílice cristalina respirable, pueden requerir evaluaciones médicas más frecuentes. Las evaluaciones médicas a menudo pueden ser realizadas rápidamente y sin abandonar el área de trabajo al realizar un cuestionario en línea. Las evaluaciones médicas específicas para cada contaminante suelen ser realizadas en persona, ya que pueden incluir radiografías de tórax, pruebas de función pulmonar, entre otros.

3. Pruebas de Ajuste: Necesarias al principio, anualmente, y cuando cambie el modelo/ tamaño de la cara o del respirador.

Cuando el trabajador haya recibido la autorización médica para utilizar el respirador, debe realizar una prueba de ajuste para determinar si el respirador se adapta correctamente a su cara.

Un respirador puesto correctamente se encontrará completamente sellado alrededor de la nariz, las mejillas, y la barbilla para asegurar que los contaminantes no puedan entrar a través de espacios o rupturas en el sello.

Colocar una mascarilla de respiración desechable requiere unos sencillos pasos:

• Sostenga la mascarilla en una mano, sosteniendo la pieza de la nariz con la punta de los dedos y dejando que las correas cuelguen.
• Ubique la mascarilla debajo de la barbilla, con la pieza de la nariz hacia arriba. Mientras sostiene el respirador con una mano, hale la correa superior sobre su cabeza y la correa inferior alrededor de su cuello, debajo de las orejas.

Colocar una mascarilla de respiración ajustada es igualmente sencilla:

• Sujete la mascarilla en una mano, ubique las correas de la cabeza completamente hacia afuera.
• Coloque su barbilla dentro de la copa para barbilla de la mascarilla. Mientras sostiene la mascarilla en una mano hale de las correas para que estas queden centradas en su cabeza. Ajuste primero las correas ubicadas detrás de su cuello y retire cualquier holgura. Prosiga a ajustar las correas superiores, manteniendo la mascarilla centrada en su rostro.
• Es necesario realizar una prueba de sellado cada vez que un respirador ajustado es colocado. La prueba de sellado de presión positiva puede realizarse colocando la palma de la mano sobre la válvula de exhalación y exhalando suavemente. La mascarilla se separará ligeramente de la cara si no hay fugas. La prueba de sellado de presión negativa puede realizarse colocando las palmas de cada mano sobre el filtro o los cartuchos de forma que queden completamente sellados, y luego inhalar. La pieza facial debe tirar hacia dentro de la cara sin que haya fugas.

Mantenga en mente, el vello facial puede influenciar el ajuste. Cualquier tipo de vello facial puede comprometer el sellado de un respirador ajustado. Esto también sucede con los respiradores desechables, a pesar del peligroso mito que no se necesita realizar pruebas de ajuste para los respiradores desechables. Recientemente, la OSHA ha profundizado en el tema del vello facial afirmando que toda la superficie de sellado debe estar limpia de vello facial y que el crecimiento nuevo del vello facial no puede exceder de un día. Las capuchas y cascos sueltos pueden utilizarse con el vello facial, ya que utilizan la presión positiva y no se sellan contra la cara. 

Las pruebas de ajuste cualitativas incluyen métodos que utilizan un agente de provocación como el Humo Irritante, el Bitrex© o la Sacarina. Estos métodos requieren primero confirmar que un trabajador es sensible a estos agentes de provocación. A continuación, la prueba consiste en la exposición al agente de provocación mientras se lleva el respirador con los filtros o cartuchos adecuados. Si un trabajador huele, sabe o reacciona a uno de estos agentes de provocación mientras lleva puesto el respirador, puede indicar un mal sellado o una fuga. 

Las pruebas de ajuste cualitativas incluyen diversos métodos para proporcionar un factor de ajuste medible para el trabajador. Los métodos cuantitativos de prueba de ajuste ofrecen varias ventajas para el uso de estos métodos más precisos. Muchas industrias utilizan este tipo de pruebas como norma, siendo la cualitativa la excepción. Además de incrementar la tranquilidad al utilizar una prueba más precisa, fingir en estas pruebas es mucho más difícil en comparación a las pruebas cualitativas. Finalmente, uno de los beneficios más significativos sería cuando se utiliza un respirador de cara completa. Las pruebas de ajuste cuantitativas proporcionan a los respiradores integrales un factor de protección asignado de 50 en comparación con un factor de protección de 10 con las pruebas cualitativas.

4. Formación: por qué, cuándo y dónde usarla, limitaciones de la mascarilla, inspección, programa de cambio de filtro/cartucho.

Los respiradores N95, por ejemplo, deben someterse a una prueba de ajuste antes de su uso. Las personas deben ser evaluadas médicamente y recibir formación para asegurarse de que entienden cómo ponérselos, así como sus limitaciones de protección.

5.  Cuidado y uso adecuado de los respiradores: uso rutinario y de emergencia.

Si el respirador se daña o se ensucia, los trabajadores deben abandonar el área de trabajo e informar a los supervisores sobre el problema.

Conclusión

En 2018, la cuarta norma de la OSHA más citada fue la Norma de Protección Respiratoria, 1910.134. Solo seleccionando el respirador correcto, teniendo un programa respiratorio escrito actualizado y asegurando que se completen las evaluaciones médicas y las pruebas de ajuste para todos los trabajadores, podemos proteger eficazmente a los trabajadores contra los riesgos respiratorios.   

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